
Jornadas de masterclass destacan por su entusiasmo en danzaafro, latina y urbana
Al entrar se podían escuchar los tambores, gritos alentadores y la risa de mujeres que con
mucho entusiasmo entregaban todo de sí. Nada hacía pensar que, al día siguiente, un nuevo
grupo llenaría la sala de una energía distinta: la pasión y delicadeza reemplazaba la fuerza
liberadora del ritmo africano Kassa, solo para dar paso, a la precisión y fuerza de la danza
urbana.
En el marco del mes de la danza organizado por la Corporación Cultural Municipal de Chillán,
se desarrollaron masterclass de 90 minutos, dedicadas a distintas disciplinas de baile. Las
jornadas del 11 y 12 de abril se vieron marcadas, en su mayoría, por la participación femenina.
Si bien, al comienzo entraban con duda y timidez, a medida que avanzaban se podía observar
cómo poco a poco se fueron liberando y genuinamente disfrutando de la experiencia en un
espacio donde todas iban a aprender y disfrutar sin tener la presión de bailar de forma
perfecta.
Muchas de ellas denominaron la actividad como un espacio seguro y liberador, como es el
caso de Bárbara Cruz, quien señala que fue una experiencia “súper enriquecedora,
maravillosa, liberadora y un espacio amoroso y seguro para danzar”.
“Maravillosa, necesaria, liberadora”
La primera jornada reunió a decenas de mujeres interesadas en profundizar en la cultura afro
o simplemente en descubrir nuevos ritmos. La clase, enfocada en conectar con el centro
corporal y la tierra, se desarrolló completamente descalzas, siguiendo la tradición de las
danzas africanas. Al ritmo de la percusión en vivo, las participantes se dejaron llevar, riendo
y disfrutando del colectivo, más allá de la técnica.
Actitud y confianza
Algo similar se vivió en la clase magistral de danza latina donde la propia instructora de
bachata, Paulette Garate, recalcó que lo importante era la actitud a la hora de bailar: “Esto se
enfoca en el área de la chica, la sensualidad, el movimiento, corporalidad, lo femenino, sacar
la confianza, la seguridad, empoderarse” indicó. Además, comentó lo esperado que es el
mes de la danza para ellos como estudio: “Siempre esperamos el mes de la danza con ansias,
presentar nuestro trabajo, (…) nos gusta que sea algo súper bonito, llamativo, que a la gente
le guste, al público en general, baile o no baile, pero que siempre deje un recuerdito que el
baile le hace súper bien a la vida de las personas”.
“En Chillán hay mucha danza”
Finalmente, para cerrar la jornada de masterclass, fue el turno del estilo urbano que consistió
en preparar una coreografía con pasos que se balanceaban de bruscos a fluidos y que hacían
resaltar cada movimiento de los jóvenes. Nicolás Suazo, profesor y fundador de la academia
Danza Urban Talent, reiteró la importancia de que se ofrezcan estas instancias tanto para
ellos como para las personas interesadas en aprender nuevos ritmos: “Es una gran
oportunidad (…) ya que se puede visibilizar el trabajo de muchas academias emergentes.
Entonces, eso motiva y quiere visibilizar un poco que en Chillán hay mucha danza. Hay
muchas personas interesadas, tanto en bailes nuevos, bailes que ya han hecho entonces, es
gratificante saber y ver acá mucha gente nueva, que está tomando clases que quizás nunca
han tomado en su vida, como son danza urbana”, señaló.
Esta fue una instancia que hizo posible una atmósfera de reunión, de complicidad y confianza
que es muy necesaria a la hora de adentrarse en una nueva actividad, pero que no siempre
se logra. Además de abrir las puertas a diferentes academias de la comuna, las clases
magistrales de danza se volvieron un espacio donde lo único que importaba era la intención
de disfrutar de ellas, y en la cual adolescentes, jóvenes y adultas lograron crear recuerdos
que de seguro mantendrán por un largo tiempo.